La donación de sangre es un acto voluntario, responsable y altruista con el que una persona puede salvar la vida a otras mediante un sencillo gesto.
La sangre es fundamental para sostener la vida humana. Por ello, cuando una persona pierde sangre debido a un accidente, una operación o una enfermedad, una transfusión puede salvarle la vida.
Como la sangre humana no se puede fabricar, es necesaria la participación de los donantes, que realizarán este acto de forma voluntario y no remunerada.
La donación de sangre es un proceso seguro y sencillo.